Estoy solo. Este es un mensaje escrito hace meses, y que se enviara esporadicamente por todo espacio y tiempo. Es probable que ya no me reconozcas, soy extraño que lleva un nombre que nadie menciona. Y ya casi nada tiene un cable hacia a mi. No tengo poder mas que para intentar conjugar algunas palabras que tengan sentido. En un parpadeo la mierda se sofisticó adquiriendo una forma imperceptible que se filtró superando las defensas que quedaban en los últimos rincones de la inteligencia. Todo argumento ahora se disuelve por medio de la polarizacion, en una riña de gallos que no lleva a nada. ¿Escuchas las risas del silencio? Quizás no lo sepas, pero tus amigos, tu familia este ya, o en riesgo, de contaminación. Es vital que asegures a quiénes todavía tienen algo de libertad en su imaginación, esas personas que todavía no conocen los límites de la doctrina. Lo sé, el cielo se ve igual que cuaquier día, se que no es visible el ataque, pero sucedió... y estan ganando. ¿Y contra quién vas a pelear cuando no lo podes ver? Estoy preparando un escape, ya no tengo energías para mas pelea, veo a quiénes alguna vez conocí preparando sus índices, listos para señalar. Son los soldados de la Polarización. Ignoro si todavía sean salvables pero como dije: sólo me quedan energías para escapar. Y lo que quizás se interpreta como cobardia es la única opción que encontré para seguir siendo quien siempre fui. Lo mas cercano a lo entiendo de libertad. Si todavía sabes quién soy, y me reconoces en otros nombres, saludame. Y cuando te sonria sabrás que hay un lugar para vos en casa. No me quiero depedir todavía... Necesito saber si hay alguien más ahí. El tiempo también es limitado y no se cuando pueda volver a escribir antes de partir.
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